Me gusta la libertad y mi trabajo de campesino. Lo disfruto. Ver cómo evoluciona todo. Si tú haces bien tu labor, te queda esa gran satisfacción. Lo más duro no es el trabajo en sí, sino la incertidumbre ante la helada, el granizo… Como dicen los mayores, vivimos mirando al cielo.
Santos Cuevas Guerrero, agricultor de Bodegas Muriel desde hace 25 años.
Su pasión y dedicación se siente en cada botella de Muriel.
Su historia es la nuestra.
Otras historias